El niño fue utilizado por los insurgentes, para transportar un paquete con explosivos, hacia una estación de Policía, al sur de Colombia.
Antonio Navarro, gobernador de El charco, lugar en el cual explosionaron las bombas, informó que al momento del estallido el niño llevaba puesto su uniforme, y apenas explosionaron las bombas el niño quedó totalmente destrozado.
Por otra parte un vocero oficial de la policía colombiana informó que este hecho será llevado antes las autoridades competentes y será denunciado ante la organización de los derechos humanos.
Fuente: 24 horas
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